Este es mi libro. Y como en casi todos los libros, la primera página siempre es un enfado. Mucha descripción, poca acción. Así fue la primera semana en la Universidad de Navarra. Venida de un país tan tradicional y abierto como Portugal, en Pamplona tuvo que crear mis própios personajes, ya que nadie me conocía.
En la primeira semana me centré sobretodo en toda la burocracia que me permite hacer ERASMUS en Pamplona, así que poco he podido aprovechar. Esa es mi primera página y como todas las otras, es necesaria para que puedas disfrutar de todo el libro.
No sé si he encontrado tantas diferencias entre los portugueses y sus hermanos ibéricos o si las he buscado incansablemente sólo para justificar y suavizar mi tristeza en los primeros días. Es como sí todo el trabajo y todo mi deseo de vivir y estudiar en Navarra se hubiera desaparecido. Además, las ganas de volver a casa me desolaban. Bueno... cuando solos siempre nos quedámos un rato egoístas, no?
La mejor parte es que los profesores no son tan indiferentes a los alumnos como creía. Su método y gentileza hacen con que la relación profesor-alumno sea agradable, pero al mismo tiempo, haya la exigencia y confianza necesárias para una buena enseñanza.
Así voy, hojeando mi libro, esperando la acción: a poco y poco, conociendo más personas y estabilizando mi estancia en Pamplona.
Si lees un libro con prisa, no sabes cual el gusto de cada pormenor.
